viernes, 28 de diciembre de 2012

El jardín de los cerezos y otras historias

 Zakin reflexiona un poco, y luego se viste y sale a la calle a tomar el fresco... Mira el cielo gris de la madrugada, contempla las nubes inmóviles, oye el grito perezoso del rascón, y empieza a imaginarse lo bien que estará cuando vuelva a la ciudad, y, terminadas sus tareas en el tribunal, se eche a dormir en su casa solitaria...
 De repente, al volver de unaesquina, aparece una figuara humana.
 <<Seguramente el guardián>>, piensa Zaikin.
 Pero, al fijarse, reconoce al veraneante del pantalón rojo.
 - ¿Cómo no duerme usted? - le pregunta.
 - No puedo - suspira el del pantalón rojo -. Disfruto de la Naturaleza... Tenemos huéspedes; en el tren de la noche ha llegado mi suegra..., y con ella mis sobrinas..., jóvenes muy agradecidas. Estoy muy satisfecho..., muy contento..., a pesar de... de que hay mucha humedad... ¿Y usted también disfruta de la Naturaleza?
 - Sí... - balbucea Zaikin -. Yo también disfruto de la Naturaleza... ¿No conoce usted, aquí, en la vecindad, algún restaurante o tabernita?
 El de los pantalones rojos levanta los ojos hacia el cielo y quédase reflexionando.
Los hombres que están de más (El Jardín de los cerezos). Antón P.Chéjov. 



Opinión: Consta de un lenguaje singular nada accesible al lector. A parte de eso las historias son a veces incomprensibles y de poco transfondo. No sé si basado en las diferencias culturales, pero se me hace una Rusia poco realista. A mi parecer, no es lectura interesante.



jueves, 27 de diciembre de 2012

FELIZ NAVIDAD 2013 (Luces de Navidad)

 
Director: Edgar Lledó

No importa de dónde se sea cuando las mejores luces de Navidad sean las estrellas, cuando el mejor regalo que hagamos sea el cariño y la mejor compañía personas alegres que te quieran.

No busquemos el plato más caro para nuestra mesa, sino el manjar más delicioso, conversaciones agradables. No cubramos nuestra anatomía de trapos impagables, vistámonos de alegría y cariño. No busquemos fiestas pasadas de rosca, sólo disfrutemos de las miradas cruzadas, las canciones recordadas o inventadas y demos traguitos de vida.

Es Navidad, no porque un calendario lo marque. Es Navidad porque el cielo se ha engalanado; porque tiernas voces inundan las calles; porque es un paso de vida para una nueva etapa. Es navidad, porque lo respiro en el ambiente.

Para todos los que os encontreis lejos de un corazón latiente que quisierais tener cerca, cerrad los ojos y decidle a la providencia que llegará el día en el que... por cada kilómetro le dareis un abrazo, por cada metro un beso y por cada centímetro el cariño que le otorgais.

FELICES FIESTAS, FELIZ NAVIDAD Y UN PRÓSPERO AÑO NUEVO!!!!!

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Laberinto de hormigón

Camino por esta ciudad desierta, pues el calor del verano mantiene alejada a la vida del oscuro asfalto. Sólo me acompaña el refrigerio inconfundible de las chicharras. Creo que es su particular queja de la situación, lo cual me consuela. Otra vez igual que al principio. Otra vez vago por tus calles perdida ante el futuro, de nuevo huyendo del regreso y perseguida por la confusión y la incertidumbre.

No es mi nombre lo que importa, sino el sentimiento que junto a mi sangre nutre cada célula de este cuerpo. Adrenalina, cabalga a galope por mis venas, y destellos de sol ven mis pupilas reflejados en los cristales de los cadáveres mecánicos de los coches de esta ciudad. Visión que me recuerda,tiempo en el que estamos. Es verano otra vez, y creo que la autonomía de mis pies me guían paso tras paso. ¿A dónde vais tan apurados?¿Hacia que futuro incierto me conducis?Solo hoy hay preguntas,pero no hay respuestas. Quiero gritar y mi garganta está seca, quiero llorar y mis ojos sólo pestañean, serán signos de deshidratación o es que hay motines dentro de mí. ¿Qué me ocurre vieja ciudad, a dónde van tus calles a parar?Giro una esquina, camino durante toda la calle, giro otra y otra calle, y otro giro y otro más, y más... Si hay otro giro más caeré al abismo de los laberintos urbanos, pienso mientras noto mi respiración agitada de miedo y mi corazón como locomotora furiosa.Termina la calle, no hay giro pero... tampoco hay salida, vuelvo atrás y me acerco al final de ella creo que es por donde vine pero es imposible pues se ve el mar. Corre brisa y es fresca, lo cual alivia todas las quejas de mi cuerpo, y hasta parece que el lamento de las chicharras cesan. Veo el agua y con ella un nuevo horizonte, y con éste seguro que la posibilidad de viajar y conocer una nueva ciudad y tener un nuevo futuro. Es alegría lo que refleja mi cara y esperanza lo que siente mi mente.Quiero terminar ya la calle, quiero ya esa promesa de vida, quiero...Dos pasos y...giro de nuevo a una selva de hormigón.Fin de la calle, fin de la playa, fin de mi nuevo futuro y mi esperanza.

Solo quedan giros, hormigón y chatarra, las protestas de las chicharras y la autonomía de mis pies vagando bajo el aplastante calor, con la única misión de encontrar la salida del laberinto de hormigón con ilusión.

jueves, 20 de diciembre de 2012

Momentos de infancia

 Hoy es domingo. Estoy sentada en el balcón mientras mamá me peina el pelo. Observo la sombra de mis pies, pues no llegan al suelo, y pienso en lo buena que es mamá.

 Como cada mañana ha entrado en el cuarto y nos ha dicho: “¡Buenos días!”, con una sonrisa en la cara. Después ha subido la persiana y ha abierto la ventana. Se mezcla en la habitación el olor a sueño con el de un nuevo día, mientras nos da un beso a cada una. Me gusta ese momento cuando siento el frío en la cara pero tengo el cuerpo calentito bajo el edredón. Mi hermana quiere dormir más, como siempre. Yo no la entiendo, ¡Si es domingo! Me gustan los domingos, porque es el día en que mamá nos pone los vestidos. Pienso en cuál me tocará hoy, mientras me lavo la cara de puntillas porque no llego bien al lavabo y el suelo está muy frío. Si me ve mamá, me regañará como siempre. No me importa, me gusta andar descalza. Luego nos ha bañado y lavado el pelo y ha dejado que Julia y yo juguemos en la bañera un rato. Más tarde nos ha ayudado a vestirnos, ha peinado a Julia y ahora me toca a mí. No me gusta ese momento, los tirones me hacen daño. Por eso mamá nos saca al balcón para distraernos y secar el pelo antes. Pienso que mamá es buena porque hace las cosas con cariño, como dice ella.

 Miro mis pies, y siento el calor del sol en ellos y en mis mofletes, aunque es invierno y por eso hace frío. Me encanta este Momento. Miro mi reflejo en el cristal de la ventana. Mi pelo brilla mientras mamá se entretiene con un enredo. Arruga la nariz y la frente cuando se concentra en algo, es muy gracioso. Peludo, nuestro gato, la mira sentado frente a mí y la mira con la cabeza de lado. A él se le arrugan los bigotes pero por el aire. No puedo aguantarme y me río.

-¿De qué te ríes cariño? – pregunta mamá.

-De Peludo. – Digo entre risas, mientras lo miro. Ahora cambió su cara y me mira a mí con cara de interrogación.

-¿De Peludo? ¿Peludo que hiciste?

-Jijijijiji… él nada, Mamá. Tú lo imitabas a él. Arrugas la nariz como él.

-¿Yo lo imitaba?... ¡Ahora, verás!

-Jajajajajajaja…para, no, no, para. – Mamá me hace cosquillas. Ay, no puedo parar de reír.

 Así entre rayos de sol, risas y buenos momentos grabo secuencias en mí cabeza, para conseguir una infancia feliz.

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 Heute ist Sonntag. Ich sitze auf dem Balkon, während Mama meine Haare kämmt, Ich beobachte den Schatten von meiner kleiner Fübe, denn sie reichen nicht bis zum Boden, und ich denke wie gut Mama ist.

 Wie jeden Morgens ist sie in unseren Schlaftzimmer gekommen und hat mit einem Lächeln im Gesicht„ Guten Morgen!“ zu uns gesagt. Nachher hat sie den Rollladen hinaufgegangen und das Fenster aufgemacht. Der Geruch nach Schlaf vermischt sich im Zimmer mit den Geruch eines neuen Tages, während Mama uns ein Küss gegeben hat. Mir Gefällt dieses Moment, wenn ich die Kälte ins Gesicht ühle , ich halte aber den Körper warm unter dem Federbett. Meine Schwester will weiter schlafen, wie immer. Ich verstehe sie nicht, heute ist ja Sonntag! .Ich mag Sonntags, weil es der Tag is, wo Mama uns die Kleider zieht. Ich denke welche würde ich heute bekommen., während ich meinen Gesicht auf Zehenspitzen wasche, weil ich nicht gut am Waschbecken gelange und weil das Bodensehr kalt ist .Als Mama mich sieht, wird sie wie immer mich ausschimpfen. Das macht nichts, mir gefällt es barfub zu gehen Später, hat sie uns gebadet und unsere Haare gewaschen. Sie hat zugelassen, dass Julia und ich eine weile in der Badewanne spielen durfen . Danach hat sie uns geholfen uns anzuziehen, dann Julia´s Haare gekämmt und jetzt war ich dran. Das mag ich nicht , die Züge tuen mir weh ., Um es abzulenken nimmt uns Mamma auf den Balkon und die Haare zu es schnelle zu trocknen. Ich denke, dass Mama gutmütig ist, weil sie die Dinge mit Liebe macht, wie sie es sagt .

 Ich gucke auf meine Fübe, wo ich die Wärme aus die Sonne empfinde, genauso wie an meiner Backen, obwohl es Winter und deswegen heute Kalt ist. Ich bin von dieser Moment Entzückt. Ich sehe meinen verspiegelung am Fenstergalss. Meine Haare glänzen, während Mama mit einem Verwicklung sich vergnügt . Sie rümpft die Nase und die Stirn, wenn sie auf irgendetwas sich konzentriert. Das ist mir sehr witzig. Peludo, unsere Katze, sitzt mir gegenüber, und beobachtet sie mit ihr Kopf seitlich. Die Schnurrbärte werden bei dem kalte Luft rümpft. Ich kann nicht mehr aushalten, und ich lache.
 
-Worüber lachst du Schatz?– Mama fragt.
 
-Über Peludo. – sage ich zwischen Lachen, sie wechselt jetz ihre Gesicht und sieht mich mit eine Gesicht Frage an.
 
-Über Peludo? Peludo, was hast du gemacht?
 
-Hihihihi... er nichts, Mama. Du nachmachst er. Du rümpfst auch die Nase wie er.
 
-Nachmache ich er?... Jetzt, wirst du sehen!
 
-Hahahahahaha... Warte, nein, nein, warte. – Mama kitzelt mich. Aah, ich kann nicht aufhören zu lachen.
 
So zwischen Sonnestrahlen, Lachen und gute Momente graviere Sequenzen in meinem Kopf, für eine Kindheit glücklich zu erreichen.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

La elegancia del erizo

"La señora michel tiene la elegancia del erizo: por fuera está cubierta de púas, una verdadera fortaleza, pero intuyo que, por dentro, tiene el mismo refinamiento sencillo de los erizos, que son animalitos falsamente indolentes, tremendamente solitarios y terriblemente elegantes."
La elegancia del Erizo. Muriel Barbery
 
 
Opinión: A pesar de tener un lenguaje, a veces, poco cercano a la cotidianeidad del lector. Es un libro de fácil lectura, pero sobre todo es un libro con mucho contenido oculto para extraer. De reflexiones profundas que acerte, y de una delicadeza similar al erizo. Su pequeño tamaño lo hace apetecible a la lectura. Magnífico libro para tardes de lectura solitaria.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Ahora, van a ser felices


  Fuera nieva, grandes copos blancos cubren cada centímetro de superficie expuesta a la intemperie. Es tarde pues la luz diurna comienza su proceso para irse a descansar. Porque las luces de la ciudad han hecho ya su chasquido al prender la chispa que las iluminará. Los habitantes ya se embuten en sus miles de pieles, en sus capas de cebolla. La tarde llega y con ella espero que la tranquilidad. Espero paciente en mi sofá restaurado en una esquina del salón. Mi compañía esta tarde son las bailarinas llamas de unas velas esparcidas por el piso, bañadas por el dulce aroma del incienso y el reconfortante sabor de un té Rooibos. Esta es mi compañía, y soy feliz.
  La oscuridad me trae la calma de saber que la decisión de dejarte ir, de soltar la cuerda fue la correcta. Calma que debe luchar contra el deseo aun humeante de levantar el teléfono de la entrada marcar tu número y decirte “¡Hola, te extraño!” o  “nos tomamos un café”; quizás la mejor opción sería la verdad “te odio, pero te extraño”, o marcar y colgar al escuchar tu voz. Pero siempre es marcar, siempre es desandar lo andado, volver a ser cobarde. Qué difícil es la vida cuando no te dicen, o aunque sí lo hicieran, que las decisiones duelen, que madurar nunca fue fácil, que por el camino son muchos los que se quedan. A pesar de esto, qué bello que es vivir.

  Anna sigue sucumbida en sus pensamientos y rodeada de sus fantasmas, sus temores. Se cree que hoy es fuerte que con pasar estas horas y con la llegada del crepúsculo todo será fácil de nuevo, todo volverá a tener sentido, las heridas dejarán de sangrar y ella será valiente sin más. Anna se crea el ambiente adecuado de cascarón, de película de Casablanca, de heroínas de cuento, de mujer que no es. Se lo crea, pues necesita combatir sus heridas más que combatir el deseo de llamar, porque la dulce Anna se cree de manos vacías.

  ¿A quién pretendo engañar? – Se pregunta en silencio viendo el escenario adornado para la obra teatral de su historia. - Las heridas antes de curarse deben sangran, antes de cerrarse necesitan unir los bordes en armonía y dejar pasar el tiempo. Para seguir adelante, se debe levantar un pie y dejar el cuerpo en instantes de peligroso equilibro sobre un único apoyo. Para ser valiente se debe contemplar todas las consecuencias y temer las posibles que no sean adecuadas. Para seguir siendo yo, debo romperme antes.

  Una sonrisa amarga se perfiló en sus labios. Su cuerpo era una tabla rígida, que no encontraba manera cómoda de descansar. La adrenalina corría por sus venas a cantidades elevadas, como en las gacetas pendientes de la aparición magistral del león. Sus sentidos no encontraban reposo, hoy ni lectura, ni música, ni incienso y menos la cocina. Hoy ella estaba de revolución y su cuerpo también.
Sabía que tenía que ser fuerte, que los débiles perdían las batallas. Y aún así sentía que sus fuerzas la habían abandonado, su pecho le oprimía, le dolía respirar el frío aire de diciembre, le dolía respirar las verdades. Su rostro le parecía cenizo, y su expresión muerta hace muchos meses. Ella solo quería correr, y correr tanto que llegara a algún sitio tan exhausta que le doliese y cuerpo y no el alma, y poder descansar.

  ¿Tan difícil es? – Tan fea soy, tan borde, tan pobre, tan tímida, tan poco extravagante, tan nada emocionante, tan agria, con tan poco humor, tan nada sexy, tan…tan yo, interrogaba a su cerebro. ¿Tan malo es ser yo?,… no creo. Pero por qué me cuesta entonces tanto conocer gente, por qué soy tan invisible a los hombres, al mundo, por qué parece ser que el universo me huye.
  Porque es tu percepción, se respondió al instante. Porque si todo fuese así no serías esa persona, a la que todos llaman amiga antes de que tú lo hagas hacia ellos. Porque no habría quien tocara tu puerta para pedirte fuerzas, o para tomar café. Porque tu no eres así, aunque sí puedan ser tus capas, y qué son las capas si no trozos de uno que vamos desprendiendo conforme maduramos. Qué es madurar si no dejar las heridas expuestas y decir al mundo sí he sufrido, he llorado, me he caído y he tocado fondo…. ¿y qué? ¿Y qué malo hay en ello?...Pues siempre he vuelto a salir a flote, he vuelto a levantarme, me he reído mil veces por cada una que he llorado, sobre todo he sufrido porque he vivido, porque estoy viva. No, no soy perfecta… ¿y qué?...no quiero esa presión, y, conforme más madure, aprenderé e interiorizaré que la vida no se disfruta esperando sino jugando.

  Ahora sí había encontrado cómo pasar las horas, cómo esperar la hora de las brujas y decirle adiós para abrazar el amanecer. Así que se recostó en el sofá, más acoplada que nunca. Y saboreó su té humeante, mientras la voz de Dido se exparcía bajándole la ansiedad. Que salgan mis fantasmas, mis temores, que los enseñaré a jugar al escondite, porque yo llegaré a ser valiente.
  En ese momento sonó el timbre de la puerta, insistentemente. Dejó su té a un lado en el suelo. Se encaminó al pasillo, encendió la luz, mientras seguían torturando al pobre botón al otro lado de la puerta. La abrió, y antes de poder separar los labios, se abalanzaron hacia el interior con sus torbellinos de saludos, palabras, abrazos y besos, risas y alegría. Esas eran ellas, sus inseparables, e inmejorables. Esas eran ellas y sabía que iban a compartir ahora todo. Ya no quería ser valiente, ya las tenía a ellas, iban a ser felices, y el madurar….ya vendría en otro momento.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Blancura

  Ya es diciembre y blanca son tus calles, blanco el horizonte que ven mis ojos. Gris se han quedados los tonos que desentonan en la blancura, grises, y amarillas las luces.

  Es el último mes y esto es en todo lo que te has convertido, árida se ha vuelto la tierra en la que nacen tus hijos. No hay más que frío en tu ambiente, más que pasos rápidos, cabezas gachas y rostros agrios.

  Mes doce del año doce, fin del mundo para unos, comienzo de vida para otros. Año como otro cualquiera, con sus guerra, sus catástrofes naturales, sus dirigentes jugando al monopoli viviente de la especulación, personas dando un paso de vida tras otro. Año como otro cualquiera en el que la vida nació en demasiados individuos y dejó de exitir en otros tantos muchos de ellos, en el que las alegrías se han vivido junto con las penas. En el que el Mundo siguió fiel a su giro. Otro año, otro diciembre, otra nevada, otra ráfaga de frío, otra blancura de tus calles.

  He vivido tus cambios y Tú el deambular de tus habitantes.Tus gamas de colores se moldearon con las estaciones, como las personas nos moldeamos con los choques propulsados por la vida. Permaneces intacta, mientras a tus pies el pueblo se desangra por la escarcha de la humanidad. Te vistes con tus más bellas galas blancas salpicadas de pedrería de luces y mercadillos navideños, y en otro extremo de la Tierra algunas de tus hermanas te miran con ojos de pobreza y devastación. Es diciembre... y a pesar de todo yo sólo quiero palparte, ansiosa, con manos frías y recorrer palmo a palmo cada centímetro de tu significado.