viernes, 24 de agosto de 2012

Ahora...




















 Ya hace unos años cantaba la comparsa de Juan Carlos Aragón, "...dicen que corren malos tiempos, para los revolucionarios...." Revolucionarios, palabra que según la R.A.E. denota en su primer significado "adj. Perteneciente o relativo a la revolución."
 Revolución, dónde está ese agitamiento de las masas, dónde nos encontramos todos los que no aceptamos esta situación. Malos tiempos corren, para los que siendo marionetas en las manos de la clase dirigente nos paramos a jugar con nuestro reflejo de juguete en el Bundestag. Copias igual de baratas somos los visitantes de palacios y castillos, admiradores de jardines cultivados. Copias igual de malas, pues tras tantos muros gruesos, tras tanto oro, sólo se escondían unos pocos, sólo jugaban a poseer el mundo los titiriteros de esas épocas pasadas.
 Después de tantos trabajos al sol para arreglar jardines que no disfrutamos, después de tantos hijos ilegítimos paridos y criados bajo el yugo de la vergüenza. Tras tanto sudor y lágrimas derrochados para cultivar alimentos que no probábamos, con tantas vidas tempranamente acabadas en guerras que no nos incumbían. Con tantas bilis atragantadas por no hablar, saliva tragada para no decir; con tantas cosas aguantadas y calladas. Con tanto y con tan poco, como la mera palabra, digamos BASTA.
Basta a la tiranía, al gobierno de unos pocos y la esclavización de muchos. Basta a los gritos ahogados, a las libertades perdidas. Basta, basta de cumplir el papel de las marionetas viejas y hajadas de este Mundo.
... ahora que corren malos tiempos para los revolucionarios...

No hay comentarios:

Publicar un comentario